Debo explicarte el concepto de "los padres amorosos", para que entiendas un significado muy preciso de estas palabras. Ya sabes bien que la Fuente del amor es el Padre. Por lo tanto, es posible sentir amor y experimentarlo con toda su dulzura y tranquilidad, vuelo y libertad, siempre que el Padre se descubra dentro de uno mismo. Solo entonces los padres se mantienen firmes en todas las circunstancias de su vida, amándose en el sentido estricto de la palabra. En todos los demás casos, no son los padres amorosos. Simplemente tienen sus propios intereses y se esfuerzan por satisfacerlos: algunos mimando a sus hijos, otros, enseñándoles muy estrictamente, y otros intimidándolos. Y siempre creen que aman a sus hijos. Lo mismo podría decirse de los padres en relación entre sí. Siguen preguntándose unos a otros: "¿Me amas?" ¿Por qué uno preguntaría sobre lo que debe estar sintiendo en cada momento? Si surge esta pregunta, significa que no hay sentimientos de este tipo. En este caso solo hay un concepto distorsionado, una ilusión de amar.

Por lo tanto, cuando digo "los padres amorosos", hablo sobre los padres verdaderamente amorosos, en lugar de sobre los padres que se engañan a sí mismos y creen que son los padres amorosos. Simplemente no puede haber ningún padre o madre que sea amoroso si el padre o la madre no se revelan en todo su alma y corazón al Padre, si él o ella no se comunican con Él con toda su alma y corazón Solo este tipo de comunión con el Padre realmente permite a los padres convertirse en padres amorosos.

Mientras tanto, un amor instintivo por sus hijos, característico de los padres, es el mismo amor del Padre, solo en un nivel de instinto, en el que viven todas las familias bastante grandes de mamíferos . Pero el hombre es el único que posee el don de la personalidad provista por el Padre. Por lo tanto, debe elevar el amor del Padre que está recibiendo de la Fuente de la personalidad, desde un nivel instintivo y al mismo tiempo animal, a un nivel superior, al nivel humano de la personalidad. Pero en realidad es imposible hacerlo sin haber encontrado al Padre dentro de uno mismo. Los principios morales, las normas éticas, los postulados de una religión solo pueden ayudar en parte; y solo para aquellos que todavía buscan a Dios, que no están satisfechos con simplemente realizar los rituales de la iglesia.